Cuando se ha cumplido poco más de un año de su llegada a la alcaldía de Alicante, Sonia Carcedo ha visitado el Club de Encuentro Manuel Broseta para hablar de la ciudad que gobierna, mostrar un radiografía de su estado actual y presentar su proyecto para el futuro más inmediato de la capital provincial. Castedo ha combinado esperanza, crítica e ilusión en una charla cuyo objetivo era también acercar un poco más a las sociedades alicantinas y valencianas.

El Vicepresidente del Club de Encuentro Manuel Broseta, Miguel Zorío, ha sido el encargado de presentar e introducir a la invitada, al a que ha calificado como «uno de los más jóvenes y sólidos valores de la política valenciana». Zorío ha repasado la trayectoria personal y profesional de Sonia Castedo, nacida en Galicia pero cuya vida ha transcurrido mayoritariamente en Alicante, donde tras llegar al Ayuntamiento como jefa de prensa, dio el salto a la política ocupando varias concejalías hasta accerder a la alcaldía en septiembre de 2008. Zorío ha calificado la forma de trabajar de Castedo de forma clara: «a grandes problemas, grandes soluciones».

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Como indica el título de la conferencia, «Alicante, presente y futuro», Sonia Castedo ha construido en su intervención un retrato de la actualidad alicantina, señalando lo que ha costado llegar al nivel en que se encuentra ahora y el esfuerzo que se va a poner para seguir creciendo en el futuro. «Alicante siempre ha sido una ciudad olvidada por las administraciones superiores, con problemas en infraestructuras, entramado social y actividades económicas de futuro, pero hemos luchado para ir mejorando todo eso día a día y después de tanto trabajo los ciudadanos ya están viendo los frutos», ha explicado Castedo. La alcaldesa se ha referido a los planes de futuro inicidiendo en la idea de que se está «haciendo ciudad de un modo sostenible y garantizando la calidad de vida que deseamos para todos los alicantinos, porque lo más importante para mi es que la ciudad se quiera mucho más; por eso el eslogan que hemos presentado recientemente recoge ese espíritu positivo: Alicante, cada vez más guapa, guapa y guapa».